Garrovillas de Alconétar, diciembre 2009
Nunca había intentado hacer ninguna foto de las estrellas, y el otro día, mientras estaba en la plaza de Garrovillas haciendo fotos nocturnas, me fijé en el cielo. Así que en un momento cambié el encuadre de la cámara, enfocando manualmente al infinito. Puse la cámara en modo manual, el diafragma abierto al máximo, exposición de 30 segundos e ISO a 1600. Este es el resultado. Hay algunas cosas a corregir, como la limpieza de las lentes y que en medio del campo, sin ningún tipo de contaminación lumínica habría sido más efectivo. Pero como he puesto en el título, esta es la primera prueba.
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