Mérida, diciembre 2009
La niebla da para hacer fotos interesantes, pero no hay que perder el momento. Este día había amanecido con una niebla intensa, pero se iba disipando a lo largo de la mañana. Y claro, una cosa era verla por la ventana y otra levantarse rápido y salir a fotografiarla (que ese día era festivo). Cuando salí me fui al acueducto, ya que lo tengo cerca de casa, y al llegar la niebla ya estaba a medio desaparecer. Pero no por eso me quedé sin hacer fotos.
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