Mérida, marzo 2012
Esta foto entronca con las publicadas hace ya algunas semanas, los días 21 y 22 de marzo pasados, dedicadas a zapatillas colgadas de cables. El motivo de esta separación en el tiempo es que esta la envié a un concurso de fotografía, y preferí dejarla fuera del blog hasta que se pronunciase el fallo. Pero ni siquiera me la seleccionaron como finalista, así que no hay motivo para dejarla apartada.
Al lado de mi casa se encuentran estas zapatillas, y además quise aprovechar la puesta de sol, buscando algún enfoque que me juntase ambos elementos. Mi ángulo no pudo ser un poco más alto para que entrasen dentro del sol, y temía que no me dejase el sol un cielo anaranjado. Pero tocando un poco el balance de blancos eso se pudo solucionar. La verdad es que no hice más intentos que esta, y como me convenció el resultado a la primera, no vi motivo para probar más.
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